Apenas
media docena de fotografías son las que reproducen el aspecto del genial
arquitecto, y la más conocida y reproducida es la que le realizó en su estudio
barcelonés Pablo Audouard en 1878. El resto, son imágenes recortadas de otras
escenas, como aquella en la que aparece en una procesión en la puerta de la
catedral de Barcelona, durante el Corpus de 1924. A ese pequeño universo de
imágenes de Gaudí se une, ahora, una nueva de 1925, que si bien no destaca por
su excelente calidad, tiene el valor de ser la última foto conocida antes de
fallecer el 10 de junio de 1926, cuando un tranvía acabó con su vida en el
cruce de la calles Bailén y Gran Vía de Barcelona. La fotografía fue presentada
momentos antes de la clausura del I Congreso Internacional Gaudí, que se desarrolló en la Universidad de
Barcelona durante la semana del 6 al 10 de octubre 2014. La ha dado a conocer
el arquitecto Jordi Bonet i Armengol, que desde 1987 hasta 2012 fue el director
de las obras de la Sagrada Familia. Según explicó, la imagen la extrajo de una
película inédita rodada en 1925 en Montserrat, cuando el artista asistió a una
boda en ese monasterio. El Arquitecto Emérito y Asesor del Patronato de la
Sagrada Familia, que no quiso desvelar la identidad de los dueños de la
película, explicó que hace unos diez años los dueños de la cinta le llevaron
las imágenes para que autentificara la presencia del personaje. Como su padre
había fallecido, habló con tres personas que sí habían coincidido con Gaudí: la
monja que limpiaba en su casa del Park Güell, la hija de los porteros de la
Sagrada Familia y el académico Josep Maria Garrut que lo saludaba a menudo
cuando el arquitecto paseaba por Sant Felipe Neri. Ninguno de los tres tuvo
dudas, según aseguró el experto en la obra del arquitecto, que aclaró que los
tres habían fallecido ya. Bonet ha destacado también el hecho de que en la
imagen Gaudí aparezca sonriente, algo que no había ocurrido en las otras
fotografías, ya que siempre se ha destacado su seriedad. Es importante la aclaración de Luis
Gueilburt: la mitad de la fotografía del retrato de Gaudí es real, pero la otra
mitad es efecto del programa Photoshop que ha permitido su retoque y dibujo, ya
que el flash con que se tomó impedía ver correctamente la otra mitad de la
cara. En esta imagen tomada en la proyección de la película inédita hasta el
día de hoy del año 1925, se ve claramente la deformación del hueso de la nariz
provocado por un tumor. Fotografia del Arquitecto Jordi Bonet Armengol sin la
parte del dibujo realizado posteriormente con programas informáticos para
salvar el flash. Ver fuente del artículo (El País)
Un hallazgo.
ResponderEliminar=)
Bellas todas sus obras
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